Mediante la lipoescultura tridimensional se puede conseguir una apariencia proporcionada, reducir el volumen corporal y recrear las formas. Los candidatos a esta intervención son personas en peso pero con adiposidad localizada, y quienes tienen excedentes moderados de piel a los que además se les realiza un tensado y extirpación de los mismos.
La lipoescultura tridimensional se realiza bajo sedación más analgesia, post- operatorio ambulatorio, solo en caso de combinarse con otras intervenciones se procede a la general y la permanencia en el hospital.
Se infiltra mediante incisiones muy pequeñas una solución anestésica con vasoconstrictor y seguidamente se procede a la aspiración de la grasa con cánulas milimétricas, y para culminar se coloca una faja compresora en las zonas tratadas.
Durante el post operatorio de la lipoescultura tridimensional se puede percibir una sensación de entumecimiento la cual se controla con analgésicos, también puede aparecer una hinchazón bajo la piel y muy frecuentemente equimosis.
Las prendas compresivas se tienen que usar al menos por 6 semanas ya que ayudan a que la piel se readapte al nuevo contorno del cuerpo, a la vez que previene la aparición de hematomas y derrame de linfa o seroma.
Es necesario además de que a partir de los primeros 10 días se realicen sesiones de ultrasonidos y drenaje linfático.
Los resultados de la lipoescultura tridimensional se ven una vez que baja la inflamación y se restablece la circulación venosa y linfática; en caso de que haga falta hacer correcciones éstas solo se podrán realizar después de 3 a 6 meses de la intervención.
Los resultados además se benefician si se tonifica la musculatura mediante el ejercicio regular y si bien no existe una regla sobre los alimentos, hay que evitar los que son inadecuados para cada uno.
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